La ergonomía se ha convertido en un aspecto fundamental para la salud y el bienestar, sobre todo para quienes deben trabajar muchas horas sentados frente al ordenador. La ergonomía en la oficina se centra en adaptar el entorno de trabajo a las necesidades de cada persona con el fin de optimizar la comodidad y reducir el riesgo de sufrir lesiones debido a malas posturas, una disposición incorrecta de la pantalla, la iluminación de la oficina e incluso los ruidos del entorno.
¿Qué es la ergonomía y para qué sirve?
El término “ergonomía” viene del griego ergon, que significa trabajo, y de nomos, que significa ley. Podría decirse, por tanto, que su significado etimológico es algo así como las “leyes del trabajo” o “la ciencia del trabajo”. En otras palabras, la ergonomía es la ciencia que estudia a las personas en su lugar de trabajo y cómo diseñar y reorganizar los lugares de trabajo, los productos y los sistemas para que se adapten a las personas que los utilizan. Es decir, que el lugar de trabajo se adapta a la persona y no al revés. El objetivo principal es mejorar los espacios y entornos de trabajo para reducir el riesgo de lesiones y aumentar la productividad.
Aspectos más importantes de la ergonomía en el trabajo
La ergonomía es cuidar que tu lugar de trabajo no sea una tortura para tu cuerpo. Es hacerlo más amigable para que tu productividad y tu salud estén en su mejor punto. ¡Vale la pena invertir un poco de tiempo y esfuerzo en esto!
A continuación te resumimos algunos de los aspectos a tener en cuenta:
- Postura: Sentarse bien es clave. La silla debe ser cómoda, con respaldo ajustable, y los pies deben estar bien apoyados en el suelo. Nada de encorvarse como un camarón.
- Altura del escritorio: La mesa debe estar a una altura donde puedas escribir y usar la computadora sin tener que levantar o bajar demasiado los brazos. Los codos, siempre en un ángulo de 90 grados.
- Pantalla: La parte superior de la pantalla del ordenador debe estar a la altura de los ojos, así no estás forzando el cuello para ver.
- Iluminación: Una buena luz es fundamental para evitar la fatiga visual. Lo ideal es luz natural, pero si no se puede, una lámpara que no haga sombras ni reflejos en la pantalla.
- Teclado y ratón: Deben estar a una distancia cómoda. No tienes que estirarte para alcanzarlos. Y si puedes, usa un reposamuñecas para evitar tensiones.
- Descansos: Levántate y muévete cada hora. Estar sentado todo el día no es bueno para nadie. Estirarse un poco y dar una vuelta te ayuda a mantenerte fresco y concentrado.
- Ejercicios: Pequeños ejercicios durante largas horas de trabajo en la oficina son muy beneficiosos para la salud física y mental.
- Ambiente: Temperatura agradable, sin mucho ruido, y si puedes, con algo de verde a la vista (plantitas) para relajarte un poco.
